El concepto de arquitectura sostenible remite inmediatamente al ahorro de energía, la baja emisión de contaminantes, el tratamiento de efluentes, etcétera. Una visión más amplia incluye cuestiones medioambientales que engloban factores relacionados con la cultura, es decir con lo tangible e intangible producto de la creación humana. El Desarrollo Sostenible se define como el compromiso por satisfacer las necesidades de las generaciones presentes sin comprometer las posibilidades de atender las necesidades de las futuras generaciones.
Esa característica temporal de la sostenibilidad se ve materializada en un magnífico edificio de Gaudí, la Casa Calvet, singular por muchas razones: es el primer edificio de pisos proyectado por Gaudí en Barcelona, fue su única obra premiada y además es la única, a excepción de las obras religiosas, que mantiene aún hoy los usos que el gran arquitecto previó cuando la proyectó: un edificio residencial con sus propietarios habitando el piso principal y alojando en su planta baja actividades comerciales, durante 124 años.
En la Casa Calvet el arquitecto realizó una inteligente aplicación del esquema constructivo y funcional típico de la casa del Ensanche Barcelonés de la época, cuya estructura se organizaba según el sistema de fachadas portantes y crujías interiores longitudinales, con dos patios laterales para ventilación y un núcleo central que incorpora la escalera, el ascensor y patios centrales.
La Casa Calvet en 1900, a poco de acabar las obras, con el local situado a la izquierda de la entrada mostrando la carpintería original, y en fotos de 2005 y 2024 con la cristalera y la cortina metálica
Los dos salones de la planta baja, destinados en origen a sede de la empresa textil de los propietarios, son espacios amplios y diáfanos gracias a que los patios laterales que arrancan en la primera planta están sostenidos por un sistema de jácenas metálicas compuestas que Gaudí dejó a la vista al igual que los forjados con una intención acorde con su visión de sinceridad estructural y constructiva.
Imágenes del interior del salón el día de la inauguración de la cafetería que permiten observar las soluciones estructurales tal como Gaudí las concibió
Afortunadamente los sucesivos usos comerciales de estos espacios no afectaron esa imagen. Solo cambió la carpintería exterior original en el local a la izquierda de la entrada, que fue reemplazada hace décadas por un escaparate acristalado protegido por una cortina metálica. La reciente adaptación para alojar la cafetería de una reconocida marca fue especialmente respetuosa de las intenciones de Gaudí, y de esa forma los amantes de su obra pueden disfrutar de las cualidades que el arquitecto decidió otorgar al espacio.
Como dato complementario cabe señalar que el otro local de la planta baja alberga desde hace varias décadas establecimientos de restauración, y mantiene también las estructuras originales que en ese caso, al haber sido las oficinas de la empresa de la familia Calvet, incluyen diversos tabiques divisorios de madera, obra también del arquitecto.
En el plano de Planta Baja presentado al Ayuntamiento para su aprobación en 1898 pueden verse los dos locales, el de la derecha donde se alojaban las oficinas de la empresa textil de los Calvet, y el de la izquierda destinado a almacén de la misma firma. En línea de puntos están graficadas las jácenas que forman la estructura que sostiene los forjados
La Casa Calvet es un edifico cuyos valores superan sobradamente su carácter monumental, alcanzando una dimensión de arquitectura sostenible en un sentido amplio, capaz de mantener sin casi modificaciones los usos proyectados a lo largo de más de un siglo. La mencionada inauguración de una cafetería no hace sino remarcar esa particular condición que la hace tan especial dentro del legado del gran Gaudí.