Finalizó la competición organizada por Never Enough Architecture con la colaboración de la Fundación Antonio Gaudí, que tuvo como objetivo profundizar el potencial de interacción de la biomimesis y la Inteligencia Artificial aplicadas a la arquitectura. El jurado otorgó el primer premio al proyecto SHATARUPA, que propusieron Shubham Dalvi y Mrunmai Patil, un equipo de arquitectos indios. La propuesta adapta la técnica tradicional para la construcción de puentes formados por raíces de árboles a la creación de habitáculos sustentables que se convierten en arquitecturas vivientes.
El segundo lugar se concedió a THE FOG CATCHER, un captador de humedad del aire inspirado en cactus propuesto por Wanchen Cai, Jiayan Huang, Siyu Dong y Ruobing Cheng, de China. La propuesta contribuye al desarrollo de comunidades en zonas áridas de forma práctica a través de una arquitectura sostenible por su bajo impacto y su construcción con materiales y técnicas locales. Este proyecto sintetiza los objetivos propuestos aplicando los conceptos de biomimesis.
El tercer puesto fue para CILIA, un purificador de aire urbano inspirado en el método de filtrado del aire de ciertos vegetales, presentado por un equipo italiano formado por Giorgio Bonadei, Alessandro Agosti, Maurizio Nigro y Francesca Girola. Mediante esos conceptos biomiméticos logra una importante contribución al mejoramiento del ambiente y aporta un valor estético al paisaje urbano.
Es destacable el alto nivel de las propuestas presentadas donde la Inteligencia Artificial juega un papel fundamental en la creación y la formulación de proyectos basados en principios biomiméticos.
Imágenes: neverenougharchitecture